Cómo Salir de la Zona de Confort con la Psicología en 7 Pasos.
- admpard
- 2 oct 2017
- 3 Min. de lectura

La zona de confort es una situación en la que no necesitas esforzarte, motivación, aprender o arriesgarte para seguir viviendo “cómodamente”
1-Saber si estas en la zona cómoda
Hazte estas preguntas:
¿Me arriesgo a estar expuesto, vulnerable y ser criticado o me quedo en lo seguro para mantener mi autoestima?
¿Busco nuevos desafíos o intento mantener mi vida sin ellos?
¿Hago lo que los demás hacen o intento encontrar nuevos enfoques o desafíos?
¿Prefiero estar pasándolo mal aunque sin riesgo o arriesgarme a encontrar algo mejor?
¿Voy a por lo que quiero o me conformo con lo que tengo?
¿Me centro en lo que me gustaría conseguir y vivir o me conformo con lo que los demás intentan?
Si tus respuestas a estas preguntas son las segundas partes de estas preguntas, estas en la zona de confort. ¡Se sincero/a, es mejor para ti!

2-Comienza a hacer pequeñas cosas de forma diferente
Un pequeño cambio te puede crear la incomodidad que te supone salir de la zona de comodidad. Solo pruébalos:
Buscar nuevas rutas para ir a estudiar o al trabajo.
Cambiar tus horarios.
Comer comida nueva.
Conocer o salir con gente nueva.
Participar en clase o participar en reuniones de trabajo.
3-Busca un área o actividad de tu vida que te suponga un cambio desafiante.
Realizando el paso anterior ya te estarás acostumbrando a sentir incomodidad, a la incertidumbre y a los pequeños desafíos.
Ahora, puedes proponerte un mayor desafío que suponga un gran cambio en tu vida y que te suponga un desafío como:
Aprender algo o haz cosas nuevas: nadar, bucear, hablar en público, viajar, bailar, saltar en paracaídas…
Cambiar de trabajo o arriesgarte a ir al extranjero a buscar uno mejor. En estos casos, hazlo con cabeza, es decir, ahorra para tener un colchón durante unos meses.
Cambia relaciones destructivas o encuentra nuevos amigos.
4-Adopta el hábito
Trabaja este hábito y conviértelo en parte de tu forma de vida y personalidad. Evita volver a acomodarte y tener que tocar fondo para motivarte de nuevo.
Recuerda que en estos cambios estarás incómodo o sentirás incertidumbre, aunque merecerá la pena.
¿Cuál es el tuyo?
5-Llega al techo
Intenta llegar al techo de lo que te hayas propuesto, intenta mejorar y empujarte más.
Por ejemplo, si te has propuesto superar tu pánico escénico y eres capaz de hacerlo en frente de 10 personas, intenta hacerlo con 40, luego con 100, luego con 500, luego con 1000.
6-Vuelve a tu zona de confort
Seguro que has escuchado las noticias de deportistas, cantantes o actores que se retiran jóvenes y se dedican a otras cosas.
Algunos comentan que no se sienten motivados y que quieren encontrar nuevos desafíos en sus vidas.
Cuando sientes que has llegado al techo, busca otro desafío o vuelve a la zona cómoda durante un tiempo para buscar un nuevo desafío.
En mi opinión es imposible estar siempre fuera de la zona de comodidad.
Si por ejemplo, estas viajando a países exóticos 12 meses, al final te habrás acostumbrado. Sin embargo, si viajas 1, 2, 5 o 12 meses y vuelves a tu casa, luego podrás salir otra vez de tu zona de comodidad y te resultará de nuevo interesante.
7-Sal de nuevo y diversifica
Cuando te encuentres de nuevo en la comodidad, sal de nuevo. Es decir, vuelve al punto 1 o directamente al 3.
Por otra parte, es bueno que diversifiques y no te “presiones a ti mismo” en una sola dirección. Si has comenzado a hablar en público y tras 12 meses te sientes cómodo haciéndolo, busca nuevos desafíos como viajar, bailar o aprender un idioma.
Como puedes ver es un ciclo: saltas de la zona confortable o de peligro/cambio desafiante e incomodidad>llegar al techo>vuelta a la zona confortable>salir de nuevo.
Trabaja este hábito y conviértelo en parte de tu forma de vida y personalidad. Evita volver a acomodarte y tener que tocar fondo para motivarte de nuevo
Prueba lo que el mundo tiene para ti.
Comments